Abre Proyecto Sur Eivissa
La Cooperativa Proyecto Sur Eivissa inauguró un restaurante orgánico vegetariano frente al puerto de Ibiza con el objetivo de ofrecer un espacio diferente para los residentes y visitantes de la isla.
Los socios de la cooperativa, Mauricio y Álvaro, posan para la foto en un sector del restaurante donde se aprecia un centenar de libros en varios idiomas y discos de música internacional.
Los socios de la cooperativa son dos hermanos uruguayos que residen en Ibiza desde hace cuatro años. Álvaro y Mauricio Riaño, junto a Andrea Brusaca, decidieron abrir su propio bar-restaurante orgánico vegetariano, en donde se pueden probar “las cocinas del mundo” y a la vez acceder a una gran variedad de discos internacionales, literatura en cinco idiomas, exposiciones fotográficas y servicio de internet wi-fi gratis.
Tanto Álvaro como sus socios trabajan para que, en un futuro no muy lejano, los progresos económicos del local sean invertidos en la creación de una casa para la mujer y un centro cultural en Uruguay.
“Queremos dar un espacio que sea utilizado como una herramienta con finalidades culturales, ya que aquí hay poco, y trabajar con varios materiales en función de que utilizamos el arte y la cultura como un modo de mejoramiento de las personas y de nosotros mismos”, ha comentado Álvaro, que es el encargado de la musicalización del local mientras la gente cena o se detiene a mirar algunas de las fotografías de la exposición.
Sobre la formación de la cooperativa, Álvaro ha dicho que “teníamos una idea de cooperativismo en Uruguay porque allá es bastante común. Queríamos hacer un trabajo donde todos los socios y demás cocineros contratados pudiéramos trabajar por igual. Entre nosotros existe una amistad de base y nos complementamos muy bien. Nos asesoramos con la Unión de Cooperativas en Ibiza, y la ayuda para la formación ha sido importante”.
Funcionamiento
En el bar-restaurante Cultura Sur Eivissa se pueden encontrar variedad de platos orgánicos vegetarianos cuyos productos provienen de granjas ecológicas de pequeños agricultores de la isla. Si bien son un poco más caros que los que llegan por transporte comercial, tienen homologación de la UE, y los propietarios del restaurante intentan que esto no incida en el precio final.
“Tenemos dos y tres noches temáticas de cocinas del mundo. Los lunes, comida cruda; los miércoles, italiana, y los jueves vienen dos cocineros y hacen algo diferente. En cada caso incorporamos un pequeño escrito de lo que es la cocina de ese lugar. También tenemos un servicio de más de 500 libros en cinco idiomas, catalán, español, alemán, inglés y francés, para los que quieren distraerse con otra cosa”, ha explicado Álvaro.
Si uno pasea por Ibiza encontrará variedad de sitios, discotecas con su particular público y lugares tradicionales donde siempre están llenos de gente. Este nuevo proyecto intenta ser una alternativa porque, según sus propietarios, “es como un lugar de descanso” donde la gastronomía y la variedad cultural permiten aproximarse a sitios desconocidos para muchos.
