Publicado por: Coceta
Madrid / Numero_13 | Vie 13 - Mar - 2009

El empleo en las cooperativas resiste

Si bien en Madrid, la evolución del empleo ha sido negativa, la excepción la marcan las cooperativas de trabajo, que no sólo mantienen el empleo sino que lo aumentan. Las cifras revelan que la ocupación en las cooperativas resiste más que en el resto de figuras empresariales.

Miembros de la cooperativa Codenta

En la foto, miembros de la cooperativa Codenta, en buena forma a pesar de la crisis.

El desempleo vuelve a ser el problema número uno de la economía española. Las cifras de paro aumentan tanto porque el mercado de trabajo no absorbe el crecimiento de la población activa como porque disminuye el volumen de personas ocupadas. Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en el cuarto trimestre de 2008, comparado con el mismo de 2007, la población ocupada había descendido en el total nacional en un 3%. En la Comunidad de Madrid la evolución fue también negativa, aunque con una intensidad bastante más atenuada (descenso del 0,5%).

De acuerdo con los datos proporcionados por el Ministerio de Trabajo e Inmigración, de diciembre a diciembre, el empleo en las cooperativas españolas descendió en unos 5.000 efectivos, en torno a un 1,8%, es decir, algo más de un punto porcentual por debajo de la reducción experimentada por el total de la economía. Dentro de lo malo, el dato apunta que la ocupación en las cooperativas resiste mejor que en el resto de la economía. Esta apreciación es tanto más certera cuanto que en igual período el número de cooperativas se redujo en casi un 4%.

Pero el signo más revelador lo arroja la comparación entre el tercer y el cuarto trimestre de 2008, que muestra un aumento de la ocupación del 6,7%, casi 20.000 personas en cifras absolutas. En conclusión, mientras la economía nacional sigue una senda negativa sin paliativos, las cooperativas pierden relativamente menos empleo o incluso lo ganan.

Es sintomático, por otra parte, que en los dos períodos en que se viene comparando el comportamiento de las sociedades laborales, ofrece un saldo bastante peor que el del resto de las empresas, pues a lo largo de 2008 ha sufrido un retroceso del 18,8% en el empleo.

En 2008 las cooperativas madrileñas han alcanzado cifras récord de personas empleadas

En el caso de la Comunidad de Madrid, aunque se parte de unas cifras de empleo en las cooperativas bastante modestas, dado el peso demográfico de la región, la evolución de la ocupación está siendo muy positiva. En diciembre de 2008 (último dato oficial) se ha alcanzado la cifra récord de personas empleadas: 15.881, que suponen un incremento del 6,2% sobre diciembre de 2007 y del 4,2% sobre el trimestre anterior.

Tales aumentos se deben tanto al saldo positivo del número de cooperativas (se han constituido más que las que han desaparecido) como a que las cooperativas existentes también han contratado más personas.

La de Madrid es esta vez una de las comunidades autónomas que presenta mejores registros en este asunto. La nota discordante es que, en los mismos períodos, el empleo en las sociedades laborales se ha reducido.

Los números, una vez más, vienen a dar la razón al mundo cooperativo y de la economía social. No es sólo una frase, sino que es una realidad: las empresas cooperativas representan una fórmula eficaz de creación de empleo, al tiempo que significan otra forma de abordar la actividad económica, centrada antes en las personas que en el capital. Es esto lo que avala al cooperativismo a la hora de demandar de los poderes públicos políticas de fomento y promoción adecuadas.