Publicado por: Coceta
Numero_11 | Mie 01 - Oct - 2008

Cambios en los procesos productivos

GRANDES TEMAS DEL COOPERATIVISMO

En los últimos años se ha abierto bajo el paraguas de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) un fuerte debate sobre el papel que debe desempeñar la empresa en nuestra sociedad. Entre los factores que han motivado este nuevo replanteamiento sobre la responsabilidad de la empresa encontramos los cambios en los modelos de producción. Mientras los controles de mando continúan en gran parte en países desarrollados, la producción se ha trasladado a países en vías de desarrollo en los que en muchas ocasiones no existen los mismos estándares en materia social y medioambiental, bien porque la legislación es más laxa o inexistente, bien porque existe una debilidad institucional y el Estado no cuenta con suficientes mecanismos de control, supervisión y sanción.

Las iniciativas internacionales tendrán una gran influencia en nuestro modelo de desarrollo y bienestar

Existen grupos empresariales que están compuestos por 2.000 compañías, miles de proveedores, cientos de miles de empleados y millones de clientes. Sin embargo, tal y como señala el catedrático de Derecho del Trabajo Joaquín Aparicio (2007), en los últimos 20 o 30 años estamos asistiendo a un proceso en el que las empresas “crecen adelgazando”. Efectivamente, hay muchas empresas que mantienen los centros de diseño y financieros en un país occidental y subcontratan todo el proceso productivo, normalmente a proveedores instalados en países donde la mano de obra es muy barata y donde los estándares en materia social, laboral y medioambiental son excesivamente bajos. Existen sectores, como el de componentes electrónicos o el textil, donde estas prácticas son mucho más pronunciadas y, en algunos casos, se fomenta la creación de las denominadas zonas francas. En estos casos existe un amplio debate sobre cuál es el alcance de la responsabilidad de la empresa matriz o empresa madre. Algunos autores (De Schutter, 2006) mantienen que la responsabilidad de la empresa madre debe alcanzar a su cadena de valores cuando los proveedores y subcontratistas se constituyen en elementos fundamentales dentro del proceso de producción o existe una dependencia mercantil del subcontratista o proveedor. Esta discusión se está planteando en el proceso de elaboración de la norma sobre RSC no certificable (ISO 2600), en la que están participando grupos de interés y representantes de empresas de más de 40 países.

Resulta indudable que la definición de aspectos como la trasparencia en la gestión de impactos sociales y medioambientales, la relación de la empresa con sus proveedores y contratistas, el control público y las iniciativas llevadas a cabo por los Estados y organismos supranacionales y multilaterales tendrán una gran influencia en nuestro modelo de desarrollo y de bienestar social.

Orencio Vázquez es director del Observatorio de RSC.