Publicado por: Coceta
Numero_14 | Vie 08 - May - 2009

La implicación de los nuevos socios es fundamental

GRANDES TEMAS DEL COOPERATIVISMO

Si bien es cierto que cualquier empresa se puede transformar en una cooperativa, más si cabe con la reciente promulgación de la Ley 3/2009, de 3 de abril, sobre modificaciones estructurales de las sociedades mercantiles, así como por la cobertura que al efecto le brindan múltiples legislaciones autonómicas sobre cooperativas y la Ley 27/1999, de 16 de julio, de cooperativas, no es menos cierto que la principal dificultad con la que se encuentran las personas que desean realizar la transformación en cooperativas es determinar la viabilidad del proyecto empresarial cooperativo.

Cuando una empresa transformada en cooperativa es viable, sus resultados, de forma sistemática, se mejoran, y ello está acreditado en la experiencia que tenemos de empresas transformadas en cooperativas.

La implicación de las personas que antes eran trabajadoras por cuenta ajena y pasan a ser socias trabajadoras es fundamental, pues son conscientes de que se juegan no sólo su puesto de trabajo sino también sus aportaciones al capital social, y sobre todo por la acertada canalización, de sus opiniones, en la toma de decisiones en la cooperativa, que en la empresa convencional, apenas si se tenían en cuenta.

Así pues las personas son el factor clave del éxito o fracaso de cualquier proyecto empresarial, y en las cooperativas siempre les ha motivado el que se tengan en cuenta sus opiniones, pero todavía, si cabe, es más ilusionante formar parte de un colectivo que toma las decisiones de forma democrática y de que los resultados obtenidos en la cooperativa se redistribuyan en función del trabajo realizado por cada una de ellas, y ello, hoy por hoy, solamente se hace en las cooperativas de trabajo asociado.

Sólo puedo, pues, concluir afirmando que tienen más posibilidades de éxito las transformaciones de empresas en cooperativas que en otra configuración societaria, porque son empresas de personas y porque la soberanía legal y real es de las personas que las integran.

Resulta indudable que la definición de aspectos como la trasparencia en la gestión de impactos sociales y medioambientales, la relación de la empresa con sus proveedores y contratistas, el control público y las iniciativas llevadas a cabo por los Estados y organismos supranacionales y multilaterales tendrán una gran influencia en nuestro modelo de desarrollo y de bienestar social.

(*) Javier Sanz es director de la cooperativa para la promoción de cooperativas Elkar-Lan.