Casi la mitad de la economía paraguaya se basa en el trabajo de las cooperativas
Desde que hace 80 años surgieran las primeras cooperativas en Paraguay, el sector cooperativo no ha dejado de crecer y organizarse, especialmente tras la llegada de la democracia. Actualmente existen cerca de 700 cooperativas, sobre todo de ahorro y producción agropecuaria (aunque comienzan a formarse también las de trabajo) agrupadas en la Confederación Paraguaya de Cooperativas (Conpacoop). Su vicepresidente, Emilio Lugo Valenzuela, ha hablado del peso que tiene el sector en la economía del país y de sus avances en la conquista de sus derechos.
Emilio Lugo Valenzuela: “Estamos hablando de un país con una economía pequeña, pero la incidencia del sector cooperativo es fundamental”.
PREGUNTA: ¿Cuál es el panorama actual del cooperativismo en Paraguay y cómo está organizado el sistema?
RESPUESTA: Actualmente hay muchas cooperativas, pero las que se mantienen operativas son alrededor de 650 a 700. El sector cooperativo paraguayo ha mantenido siempre una autonomía del Estado a lo largo de más de 80 años, que es el tiempo de desarrollo que tiene la economía social en Paraguay. Las cooperativas se han desarrollado solas, de forma autogestionada, en recursos, organización empresarial, etc. Nos hemos manejado en un 95% con recursos propios.
Tenemos una organización del sector bien definida. Están las cooperativas de base, cuyo desarrollo fundamental está instalado en el sector de ahorro y crédito y de producción agropecuaria. Esas cooperativas de base están organizadas en torno a dos organismos de segundo grado: las centrales, que ponen el acento especialmente en los servicios financieros, dan préstamos a cooperativas que lo necesitan, y las federaciones, que son de carácter más gremial y de formación.
Estas dos organizaciones de segundo grado a su vez se organizan y tenemos una confederación, la Confederación Paraguaya de Cooperativas, que es la máxima entidad gremial del país y reúne a todas las cooperativas.
P.: ¿Cómo se inserta el movimiento cooperativo en el escenario de cambios políticos que ha vivido el país?
R.: Durante el periodo dictatorial, entre 1954 y 1980, el desarrollo del movimiento cooperativo fue escaso por la falta de libertad de organización. Sobrevivimos a la dictadura y en la época de transición el sector vive un gran desarrollo que ha llegado hasta hoy. De unas 125.000 personas asociadas hasta 1989 pasamos a más de un millón de asociados ahora en el sector cooperativo paraguayo. La incidencia es enorme, teniendo en cuenta a las familias, estaríamos hablando de unos cuatro millones de personas vinculadas directa o indirectamente al movimiento cooperativo en un país que tiene aproximadamente 6.400.000 habitantes. Así es que toda la economía paraguaya descansa, en un 40 o 50%, sobre el trabajo del sector cooperativo. Estamos hablando de un país con una economía pequeña, pero la incidencia es fundamental.
Desde un punto de vista político hemos logrado algunas cuestiones fundamentales. Una es que en la constitución paraguaya de 2002 se señala expresamente el compromiso del Estado para apoyar, promover y fomentar la economía social. A partir de ahí generamos dos leyes fundamentales gracias a las que se reconoce a las cooperativas como organizaciones especiales con características diferenciadas que requieren una legislación y un tratamiento impositivo diferenciados.
P.: ¿Cómo se han desarrollado las cooperativas de trabajo?
R.: Las cooperativas de trabajo tienen un desarrollo incipiente. La Conpacoop tiene como uno de sus objetivos, dentro del plan estratégico elaborado, el fortalecimiento de otros tipos de cooperativas. Una es la de las cooperativas de trabajo. Ya contamos con una central de cooperativas de trabajo y servicios.
P.: ¿Qué participación tienen las nuevas generaciones en estas iniciativas?
R.: Hay mucho respeto. El sector cooperativo ha ganado mucha consideración y los jóvenes, poco a poco, también van incorporándose a las actividades cooperativas. Por ejemplo, existen comités juveniles en las cooperativas, y también otros tipos de comités con participación de jóvenes.
P.: ¿Cómo ha afectado el desempleo al cooperativismo? ¿Se ha incorporado mucha gente desempleada o han reconvertido empresas en crisis?
R.: La crisis financiera internacional no ha tenido un efecto muy dramático en nuestra economía ni, creo, en la del resto de los países del Mercosur. Hemos tenido un crecimiento negativo, pero a eso han contribuido otros factores como el climático, con la tremenda sequía.
