Colors, del drama de las Torres Gemelas a un restaurante ejemplar

11 de septiembre de 2001. Todo parecía destruirse en Nueva York, y sobre todo, el mundo parecía acabarse para los sobrevivientes de las Torres Gemelas, que habían escapado de la muerte pero no de las secuelas físicas y psíquicas. Todo era tristeza y confusión. Para ellos no fue fácil reconducir sus vidas. Un grupo de sobrevivientes, sin embargo, sacó fuerzas y decidió soñar con un futuro. Fue así como se pusieron en marcha y montaron el restaurante cooperativo Colors, que hoy sirve cinco menús especiales dedicados al mundo (menú Planeta, Tierra, Océano, Cielo e Infierno).

Vista actual de Manhattan. Foto: Sev!! (flickr.com).

“En Colors reflejamos nuestra diversa fuerza de trabajo mediante la cocina global. Ofrecemos platos pequeños de una variedad de cocinas que representan al mundo y esperan hacer una verdadera cena comunal, introduciendo los excitantes nuevos sabores que cambian con las estaciones”, explican desde el restaurante, que invita a las personas a “comer éticamente”.

“Estamos comprometidos con los productos locales, provenientes de granjas pequeñas o medianas, que invierten en calidad e integridad para sus productos”, agregan. Nuestra oferta proviene de fuentes locales, orgánicas y sostenibles”.

Pero en Colors no se trata sólo de comida ecológica y de sabores mundiales, sino que apuestan por la calidad de vida de sus socios trabajadores. “Somos una cooperativa de trabajo que permite a sus trabajadores la autogobernanza; que apuesta por unas mejores condiciones laborales, que mejora los salarios y se posiciona por la equidad racial y el ascenso en las carreras profesionales de sus socios, dentro de la industria gastronómica”, añaden. “Demostrando que los restaurantes pueden proveer mejores salarios y condiciones laborales sin que ello merme el beneficio, Colors espera servir como modelo para otros restaurantes.