Los indios se unen en cooperativa para producir películas

Bollywood (mezcla de Bombay y Hollywood)es como se llama a la industria cinematográfica de lengua hindi, que produce un promedio de 700 películas al año y cuyas historias comienzan a estar reconocidas en el ámbito mundial. Allí han hecho la primera película cooperativa.

Una de las artistas de cine, antes de rodar en Maharashtra (India).

Más de 150 personas del Estado de Maharashtra (el Estado más desarrollado del país, donde el cooperativismo está tomando fuerza), incluyendo doctores, ingenieros, abogados y artistas, financiaron la producción del film.

La película, Hume Jeena Seekh Liya (“Aprendimos a vivir”), es una historia filmada en 35 milímetros sobre un romance adolescente que se vuelve problemático por temas socio- políticos. No tienen apoyos de grandes empresarios ni estrellas que ganen millonadas. Las entradas han sido vendidas casa por casa.

“La mayoría de las personas que han pagado forman parte del Movimiento Spandan Cinema Parivar, y les gusta ver un cine de buenas historias sobre la vida cotidiana”, cuenta a un periódico local Milind Ukey, director del filme.

Milind Gunaji, un actor conocido en el cine indio que tuvo un papel importante en la trama, se muestra entusiasmado. “El filme está basado en una novela muy exitosa, Shaala, de Bokil”, explica Gunaji. “Creo que la gente estará muy feliz de verla”.

Bollywood tuvo una experiencia similar en 1976, cuando medio millón de productores de leche contribuyeron con dos rupias (unos tres céntimos de euro) para hacer una película sobre el movimiento cooperativo.

“Ésa era una película sponsoreada para promover una causa. Esto forma parte de nuestras carreras. Cualquier beneficio que tengamos será repartido entre los miembros. El monto se dará a los contribuyentes según la cantidad que hayan puesto, más el interés”, cuenta Gunaji.

Éste es el primer largometraje de Spandan, que tiene un programa variado de apoyo a la cinematografía y ha realizado unos cien cortos.

“En Bollywood uno necesita un mecenas para tener éxito”, agrega Amle. “A través de Spandan queremos que ya no sea necesario. Nosotros somos campesinos, cultivadores del cine”.