Publicado por: Coceta
Nacional / Numero_19 | Mar 25 - May - 2010

En el último año se crearon un 15% más cooperativas de trabajo

Se han creado prácticamente un 15% más cooperativas de trabajo en 2009 que en 2008. Esta cifra es especialmente importante, puesto que en 2008 habían disminuido un 60% respecto del 2007. Además, de todas las cooperativas creadas en 2009 (de vivienda, de consumo, agrarias, etc.) las de trabajo representan un 64%.

Asamblea General de Coceta 2009

Miembros de Coceta alzan su mano para votar en la Asamblea General de 2009.

Este mayor número de empresas cooperativas ha generado un incremento en el número de puestos de trabajo iniciales, lo que en los momentos actuales, debe de ser destacado; así un 7% más de personas, que en 2008 creyeron en la cooperativa de trabajo, en el momento de su constitución, para crear su propio puesto de empleo.

“Estas cifras, a veces frías, esconden historias de personas que han apostado por una fórmula empresarial, en la que aún existen valores”, comentan desde la Confederación Española de Cooperativas de Trabajo Asociado (Coceta). “Son empresas en las que, como personas que la trabajan y la gestionan, lo hacen, precisamente, con el objetivo de erigirse, como personas, en el centro de la actividad empresarial. Aún más, estas cifras nos llevan a poder proclamar que existen vías, caminos y soluciones, en definitiva, que permiten generar empleo, crear riqueza y cohesión social”.

El balance de Valladolid

Las organizaciones confederadas representativas de las cooperativas de trabajo asociado se habían reunido hace exactamente un año en Valladolid para analizar, reflexionar y buscar soluciones a la situación que se venía generando de una reiterada y paulatina disminución de las cooperativas de trabajo creadas.

Durante dos días, se habían llevado a cabo análisis de las experiencias recabadas en las Comunidades Autónomas en las que se había producido un mayor índice de creación de cooperativas de trabajo en 2008, como Andalucía, Valencia y Murcia. Igualmente, se analizaron experiencias como la creación de entidades específicas para la generación de cooperativas, en algunos casos, bajo fórmula cooperativa, como las existentes en País Vasco y Cataluña, Elkar-lan y Ara.coop, respectivamente. Y finalmente, se propusieron una serie de medidas que llevar a las diferentes Comunidades Autónomas y con las que desde las entidades confederadas así como la propia confederación se implicaron para su realización.

En años anteriores se venía dando una paulatina disminución de las cooperativas de trabajo creadas

“Como se comentó, resulta muy positivo reflexionar globalmente para después cada uno actuar localmente en su territorio”, según fuentes de Coceta. “Las medidas lanzadas desde Valladolid nos lo confirman. Fueron importantes el trabajo continuo y cercano con las personas que quieren tener un empleo, que quieren apostar por su futuro, el análisis de la realidad empresarial existente. Es importante la formación adecuada al puesto de trabajo y a la fórmula empresarial, las modificaciones legislativas, en algunos casos, las herramientas generadas, la visibilidad de un modelo de hacer empresa. Todo ello ha generado sus frutos”.

Para la confederación de copeerativas Coceta, aún queda camino por recorrer, “se precisa que el mercado financiero se abra, se concedan préstamos y líneas de crédito para las empresas, porque tan importante como nacer es mantenerse y crecer, y en estos momentos las empresas cooperativas están demandando liquidez para afrontar nuevas inversiones que generen nuevos empleos. También están pendientes reformas en el campo de la fiscalidad, en el régimen económico de las cooperativas que les posibiliten el mantenimiento en los mercados, en igualdad con otras fórmulas empresariales”.

Según la confederación de cooperativas Coceta, además, es necesario que la Ley de la Dependencia sea una realidad. “Se precisa un marco de contratación pública acorde con las directivas europeas, sin interpretaciones restrictivas como las existentes en la normativa vigente.

Todo ello, obliga a seguir trabajando, tanto desde las organizaciones representativas de las cooperativas de trabajo como desde los diferentes gobiernos, en escalas central y autonómicas y en niveles de administración provincial y local”.